Existen otras alternativas, resulta que los maestros podemos crear un vínculo con nuestros alumnos y al conocerles resulta sencillo generar el deseo. El deseo de hacer, de investigar, de conocer... y es ese deseo el que nos permite avanzar en el aprendizaje acompañado de altos niveles de esfuerzo, de forma disciplinada y sobretodo con respeto hacia sí mismos, los demás y con los objetos que trabajamos.
Una veces es explosivo (como el vídeo, podéis preguntar la razón) y otras dulce y sensible como cuando se observa ascender lentamente el vapor de agua.

No hay comentarios:
Publicar un comentario